Las personas y colectivos que estamos hoy aquí queremos sumar voz y esfuerzos al concierto mundial que pretende parar la guerra. Independientemente de las opiniones y creencias de cada cual, se impone un hecho innegable que llena de pavor a cualquier ciudadano y hace imposible la neutralidad: la imagen de víctimas civiles y de criaturas indefensas aplastadas por las bombas supuestamente “inteligentes”, subleva los corazones de la inmensa mayoría de la humanidad e incita a reclamar el cese inmediato de la matanza.

¿Son los tanques, los misiles y las bombas los llamados a sembrar el mundo de “democracias”? El gobierno del pueblo, significado literal del concepto “democracia”, sólo puede originarse como resultado de la lucha de cada pueblo. El ejemplo de España es aleccionador. Ningún demócrata español habría aceptado la democracia de manos de una potencia que, para “liberarnos”, hubiera arrasado con sus misiles Madrid, Barcelona o Valencia.

Lo cierto es que la invasión de Irak, que ya dura 17 días, es un brutal ejemplo del Imperio de las armas, la exportación de la “cultura” de la fuerza y la imposición unilateral de un nuevo orden internacional al servicio exclusivo de los intereses económicos y políticos de los EE.UU.; todo lo cual fomenta, además, el odio racial, la profundización del abismo entre culturas y religiones, los fundamentalismos y, como respuesta desesperada de los que ya nada tienen que perder, la más que posible generalización del terrorismo internacional.

Por encima de las ideologías y de las opiniones políticas, ese mundo en el que impere la razón de la fuerza en vez de la fuerza de la razón, no lo quiere nadie, o lo quieren muy pocos. Por ello hacemos un llamamiento a toda la sociedad oriolana para que se sume a cuantas movilizaciones convoque este FORO SOCIAL. Ejerceremos pacíficamente nuestros derechos de expresión, reunión y asociación para exigir:

-El cese de esta masacre que sólo crea dolor, odio y resentimiento.

-La rectificación del gobierno español y el abandono de su apoyo a las tesis belicistas.

-La no utilización de las bases de EE.UU. en España para atacar a Irak.

-El regreso de nuestros soldados enviados a la zona.

-El envío urgente de ayuda humanitaria para paliar los efectos devastadores de esta guerra.

-La recuperación de la legalidad internacional que permita solucionar los conflictos agotando las vías pacíficas y dentro del seno del Consejo de Seguridad de la ONU.

En fin, una distribución más justa de la riqueza que haga imposible que cualquier ser del planeta sienta desprecio por la vida propia y también por la de los demás.

 

PORQUE LA PAZ ES POSIBLE, Y OTRO MUNDO ES POSIBLE: ¡PAREMOS LA GUERRA!

5 de abril de 2003